Croquetas crujientes sin gluten de quinoa, maíz y tofu ahumado deliciosas y muy fáciles de hacer.
La cocina macrobiótica más simple es la más avanzada. Porque cuando eres capaz de comer con consciencia y libertad absolutas, sencillo, sin adornos ni mezclas excesivos y lo disfrutas realmente sin echar de menos nada, te sientes bien y feliz. Esto significa que te has desapegado de muchas cosas. La comida sencilla te hace brillar y deja espacio para ese otro alimento que potencia tu evolución y es la nutrición espiritual.
Esto es lo que practico en mi día a día, enseñando en mis cursos y consultas cómo llegar a este punto a través del autoconocimiento y de la liberación de resistencias, dogmas y creencias.
Como sé que os encantan las croquetas crujientes, sin gluten y sin lácteos, os comparto la receta de éstas de quinoa y maíz con tofu ahumado que me traen memorias de mis ancestr@s indígenas y me conectan con su legado de sabiduría.
1- Lava bien, tu esta ligeramente y luego hierve 1 vaso de quinoa con 2 de agua + una pizca de sal.
2- Añade cuando esté hecha 50 gramos de maíz cocido sin azúcar y perejil picado fino.
3- Talla medio bloque de tofu ahumado, mezcla con los ingredientes anteriores y compáctalos haciendo bolitas.
4- Rebózalas en pan rallado de maíz y dóralas en un poco de aceite de oliva virgen extra.
5- Sírvelas con chucrut o rabanito rallado y verdura verde escaldada.